D. José Mª Jardón y Trelles (Ortiguera 1844- Madrid 1907), como mencionábamos en La Quinta Jardón, no puede ser considerado un emigrante típico, ya que cuando emigró a Argentina era capitán de la marina mercante. Instalado en Argentina amasó una gran fortuna dedicándose a actividades mercantiles y fundando entre otras empresas el Banco Español del Rio de la Plata. Se casó con la argentina de origen francés Manuela Perissé Funes (1850-1913) con la que tuvo cinco hijos: Fernando (1879-1924), Eduardo (1882-1942), José María (1887-1943), Luisa (1888-1955) y Rosa (1893-1971).
Don Eduardo Jardón Perissé, que había nacido en Buenos Aires, a los cinco años junto a toda la familia regresó a España instalándose primero en Barcelona y después en Madrid donde fijaron definitivamente su residencia. Estudió medicina, perteneciendo a la Sociedad de Pediatría de Madrid. Se casó con la franquina Teresa Ron Magdalena ( ¿?-1975) con la que tuvo cuatro hijos: Carlos(casado con Pergentina Revuelta), Francisco (casado con Concepción Arango), Eduardo (casado con Ana Arango) y Fernando. Los tres últimos fueron atletas olímpicos participando en 1948 con el equipo de hockey en las olimpiadas de Londres de 1948. Don Eduardo tras la muerte de su madre y siendo un rico heredero decidió construir en 1914 esta villa en Viavélez, localidad de su mujer, como residencia de verano. Para ello encargó el proyecto al arquitecto madrileño Luis Sainz de los Terrenos (Santander, 1876 - Madrid, 1936).El mismo arquitecto fue quien le construyó una casa unifamiliar en la calle Príncipe de Vergara de Madrid. El palacio conocido también con Quinta San Jorge se finalizó en 1918, es de estilo francés y está situado en una finca de 16.000 metros cuadrados, donde se ubican también un garaje, la vaquería y la casa del jardinero. El palacete de cuatro plantas y una superficie total aproximada de 2.000 metros cuadrados tiene una planta en forma de H, constando de un cuerpo central más ancho y los laterales más altos. El cuerpo central, de planta rectangular, tiene un pórtico con elegantes columnas pareadas que sostienen un soberbio balcón volado rodeado por balaustrada de piedra. Según su nieta Lola en su época de esplendor llegaron a habitar el inmueble hasta cuarenta personas atendidas por una decena de empleados del servicio doméstico. Hoy en día el palacio está en venta.
D. Eduardo como su padre y sus hermanos fue muy generoso con el pueblo de su mujer, donó el terreno y construyó el cementerio parroquial, las escuelas, ayudó económicamente a los más necesitados del pueblo, hacía consultas desinteresadas para enfermos e incluso promovió algunas vías de comunicación en su querido pueblo.
Fotos antiguas: http://www.asturiaspordescubrir.com/articulo/-p-jardon-revisitado/
Fotos del interior: http://www.asturiaspordescubrir.com/articulo/recuerdos-de-viavelez/
Precio y más fotos: http://www.idealista.com/inmueble/26972493/
Edificio en el que parece ser se inspiró el arquitecto
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